TARZÁN, EL DIABLO DE CUMANÁ
A: Luís Hurtado, el Diablo de Cumaná 1992 ¿Cuánto tiempo hace que sentía esa inspiración cristiana por el diablo? No lo sé…Nadie lo sabe. Nadie sabe tampoco cómo llegó al mundo. Sólo Beltrana la mujer de Juan, de cuyo vientre un día cualquiera, nadie sabe qué año, nació un niño. Es difícil averiguar el verdadero origen de alguien si no pertenece a la nobleza. El origen de Luís, es muy pobre, descendiente de un grupo de venezolanos que aún siendo muy dignos, para los otros, brillaron de dignidad y ausencia de bienes materiales. Su vida transcurrió en un ir y venir por pintar anuncios y lotería, salir a la calle para distraer a los demás…lo demás, no importa –solía decir-. La generación de mis padres decidió llamarlo “Tarzán”, por haber realizado durante un carnaval, una muy lucida comparsa donde imitaba aquellas películas que acapararon toda una época en los cines del pueblo. Luís, que así se llama nuestro hombre, iba por la vida aflicto, con su andar casquivano y la mente perdida...